Se trata del "helicoverpa Armigera", una plaga que ya afectó a la Provenza francesa el pasado año y que ha hecho saltar todas las alarmas de los lavandicultores.

En una nota de prensa, la Asociación Nacional de Plantas Aromáticas (Anipam) ha explicado el problema al que se enfrenta el sector.

"Estos gusanos, parecidos a los gusanos de seda, tienen una propagación explosiva y destacan por su voracidad. Se comen las flores y dejan los tallos de las plantas desnudos, sin esencia, y la única solución es la siega urgente de las plantas, para evitar su mortalidad", ha indicado el presidente de Anipam, Abelardo Carrillo.

El responsable de Anipam ha visitado este miércoles una parcela de Cogollor (Guadalajara), afectada por el gusano.

Hasta allí se ha desplazado también el presidente de APAG, Juan José Laso, así como representantes de la Asociación Paisajes de Lavanda de Brihuega, de COAG y del sector de la apicultura.

En este contexto, Carrillo ha considerado "imprescindible" que se autorice la siega sin restricciones, ya que esperar hasta lo que exigen actualmente las administraciones puede resultar "letal" para los cultivos afectados.

Asimismo, ha avanzado que la próxima semana tendrá lugar una reunión entre los productores afectados y la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, con el objetivo de buscar una solución a la problemática del sector.

Ha opinado, además, que el Gobierno regional debería colaborar en el conocimiento científico sobre esta planta, para poder reaccionar ante este tipo de especies invasoras con la urgencia necesaria en estos casos.

Un problema más para un sector en crisis

A esta situación se une la "grave crisis" a la que se enfrenta el sector desde hace algunos años, con "una caída brutal" de los precios que hace imposible la venta del aceite esencial, ha denunciado.

"Llevamos tres años sin vender un solo euro. No entendemos cómo la industria cosmética y de perfumería no deja de crecer si a nosotros no se nos está comprando la materia prima”, ha asegurado el presidente de Anipam.

También la presidenta de Paisajes de Lavanda de Brihuega, Lorena Tirado, ha reconocido el peligro que supone este gusano para el sector, "una mala noticia" que se suma a la "dramática situación" que atraviesan los productores.

"No entendemos la versión tan optimista de las administraciones, que solo se fijan en los efectos positivos de nuestros cultivos en el turismo y la cultura de la zona, pero no atienden las necesidades de los verdaderos actores de este modelo agroturístico, que somos los agricultores", ha señalado.

De igual modo, ha destacado la necesidad de que aumenten las ayudas agroambientales y se eliminen las restricciones en la cosecha de manera excepcional debido a esta amenaza.

"Si cumplimos con la normativa actual y esperamos hasta cuando nos exige la Junta, la mortalidad de las plantas va a ser brutal", ha aseverado Tirado, quien ha lamentado que las administraciones "no están apoyando a los lavandicultores, excluyéndoles de la sequía pese a sufrirla y prometiendo más ayudas" que no acaban de llegar.