El municipio de Brihuega, enfrenta la necesidad de actualizar y reorganizar su planificación urbanística para responder a los retos actuales y futuros. Las Normas Subsidiarias vigentes, que datan de los años ochenta, han quedado obsoletas en muchos aspectos, ya que no contemplan las demandas modernas en términos de sostenibilidad, crecimiento ordenado y preservación del patrimonio local. 

Ante esta situación, es imprescindible desarrollar un nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM) que establezca las directrices del futuro urbanístico del municipio.

Desde la aprobación de las Normas Subsidiarias en los años ochenta, Brihuega ha experimentado importantes cambios tanto en su dinámica poblacional como en sus necesidades de infraestructura. 

Sin embargo, la falta de una planificación actualizada ha derivado en limitaciones para el desarrollo de nuevos proyectos, así como en la ausencia de una visión integral para el crecimiento urbano.

Las normas actuales no se alinean con los estándares contemporáneos en términos de sostenibilidad, eficiencia energética y conservación del medio ambiente. Además, la falta de un POM dificulta la atracción de inversiones, dado que las directrices urbanísticas claras son un factor clave para el desarrollo de proyectos a largo plazo.

La necesidad de un POM para Brihuega radica en los siguientes puntos clave:

Crecimiento ordenado: El nuevo POM debe establecer una estructura clara para el desarrollo del municipio, identificando áreas aptas para la expansión urbana, y preservando aquellas que tienen un valor natural o patrimonial.

Sostenibilidad y eficiencia: Un enfoque moderno en el urbanismo requiere de políticas que promuevan la sostenibilidad. El POM debe incluir directrices para el desarrollo de construcciones eficientes energéticamente, así como la promoción de energías renovables y espacios verdes.

Patrimonio histórico y natural: Brihuega cuenta con un importante patrimonio histórico y natural que debe ser protegido. El POM permitirá diseñar estrategias para garantizar su conservación al mismo tiempo que se permite un crecimiento urbano coherente.

Atractivo para inversores: Un plan de ordenación claro y transparente ofrece seguridad jurídica tanto para los inversores privados como para las instituciones públicas, facilitando la creación de nuevas infraestructuras y servicios en el municipio.

Conclusión

El municipio de Brihuega necesita de manera urgente un Plan de Ordenación Municipal que sustituya las actuales normas urbanísticas de los años ochenta. Este nuevo plan debe estar alineado con los retos actuales y futuros del municipio, garantizando un crecimiento ordenado, respetuoso con el medio ambiente y sostenible a largo plazo. 

 Además, será clave para atraer inversiones y promover el desarrollo económico de la localidad, todo ello manteniendo un equilibrio con la preservación de su valioso patrimonio.